El futuro presidente de la Comisión no ha dado a ningún país garantías sobre las carteras y exige, para elegir, un abanico de aspirantes y más mujeres
Beatriz Navarro
La Vanguardia 07/07/2014
La necesidad de que la composición de la próxima Comisión Europea respete mínimamente la igualdad de sexos puede complicar el nombramiento del eurodiputado popular Miguel Arias Cañete como comisario europeo por España. Jean Claude Juncker, propuesto por los Gobiernos europeos como presidente del futuro ejecutivo comunitario, no se conforma con que los gobiernos le envíen un solo candidato para formar su equipo, sobre todo porque la mayoría de nombres que le han sugerido corresponden a hombres. De ahí que el futuro presidente de la Comisión haya exigido a los líderes europeos que le propongan un mínimo de "dos o tres nombres" y que al menos uno de ellos sea el de una mujer, según explicaron fuentes del entorno del ex primer ministro luxemburgués.
Este es el mensaje que Jean Claude Juncker ha transmitido al presidente español, Mariano Rajoy, que contaba con que Arias Cañete pudiera pasar en poco tiempo de jefe de la delegación del Partido Popular en el Parlamento Europeo (y que ocupa uno de sus 751 escaños desde el uno de julio) a comisario europeo. Sin embargo, Juncker niega haber dado garantías a ningún país sobre la cartera que ocupará o sobre la persona que aceptará para el cargo y ha exigido que se le presente un abanico de aspirantes entre los que pueda elegir.
Esta exigencia obligará al presidente del Gobierno español a enviar a Bruselas una lista con más nombres que el de Arias Cañete y que, por lo tanto, incluya personalidades políticas a las que esté dispuesto a renunciar a nivel nacional, ya que, en teoría, la decisión final está en manos del presidente de la Comisión Europea.
Juncker espera obtener el respaldo del pleno del Parlamento Europeo el próximo 15 de julio. Pero para conquistar el Berlaymont, la sede de la Comisión Europea, todo su equipo deberá pasar un voto de confianza y empieza a temer que sea rechazado si no respeta mínimamente el equilibrio de sexos. "Es difícil de imaginar que el Parlamento europeo vaya a aceptar un colegio de comisarios que tenga menos mujeres que el actual", explica la portavoz de Juncker. Tan pronto como sea elegido al frente de la Comisión, Jean Claude Juncker se lanzará a formar equipo y a negociar con las capitales los nombres y la distribución de carteras que lo conformarán. Las mujeres han sido las grandes olvidadas por los gobiernos a la hora de sugerir candidatos a comisarios. "Por el momento, oímos hablar sobre todo de hombres y, si seguimos así, el equipo podría acabar formado por 26 hombres y sólo dos mujeres, con diez candidatos aspirando a una cartera de peso en el ámbito económico", ironizan fuentes cercanas a Juncker, que sugieren que se podría premiar con mejores puestos a los países que envíen candidatas femeninas bien preparadas a Bruselas.
La otra incertidumbre que planea sobre la candidatura de Miguel Arias Cañete, que dejó la cartera del Ministerio de Agricultura en el Gobierno de Mariano Rajoy para ser comisario europeo con el peaje habitual en el Partido Popular de hacer campaña durante las elecciones al Parlamento Europeo, es el impacto que sus declaraciones machistas durante la campaña electoral pueden tener durante las audiencias que celebrará la Eurocámara en septiembre para evaluar a los candidatos.
La polémica generada por las afirmaciones de Cañete -que excusó su escasa brillantez en el debate con la socialista Valenciano porque competía con una mujer- cobró dimensión europea cuando varios eurodiputados socialistas y medios de comunicación arremetieron contra el sesgo sexista de esas declaraciones. Fuentes parlamentarias indican que la incertidumbre está haciendo mella en el exministro español, mientras el PSOE reclama a Rajoy que proponga a otro comisario.
La necesidad de que la composición de la próxima Comisión Europea respete mínimamente la igualdad de sexos puede complicar el nombramiento del eurodiputado popular Miguel Arias Cañete como comisario europeo por España. Jean Claude Juncker, propuesto por los Gobiernos europeos como presidente del futuro ejecutivo comunitario, no se conforma con que los gobiernos le envíen un solo candidato para formar su equipo, sobre todo porque la mayoría de nombres que le han sugerido corresponden a hombres. De ahí que el futuro presidente de la Comisión haya exigido a los líderes europeos que le propongan un mínimo de "dos o tres nombres" y que al menos uno de ellos sea el de una mujer, según explicaron fuentes del entorno del ex primer ministro luxemburgués.
Este es el mensaje que Jean Claude Juncker ha transmitido al presidente español, Mariano Rajoy, que contaba con que Arias Cañete pudiera pasar en poco tiempo de jefe de la delegación del Partido Popular en el Parlamento Europeo (y que ocupa uno de sus 751 escaños desde el uno de julio) a comisario europeo. Sin embargo, Juncker niega haber dado garantías a ningún país sobre la cartera que ocupará o sobre la persona que aceptará para el cargo y ha exigido que se le presente un abanico de aspirantes entre los que pueda elegir.
Esta exigencia obligará al presidente del Gobierno español a enviar a Bruselas una lista con más nombres que el de Arias Cañete y que, por lo tanto, incluya personalidades políticas a las que esté dispuesto a renunciar a nivel nacional, ya que, en teoría, la decisión final está en manos del presidente de la Comisión Europea.
Juncker espera obtener el respaldo del pleno del Parlamento Europeo el próximo 15 de julio. Pero para conquistar el Berlaymont, la sede de la Comisión Europea, todo su equipo deberá pasar un voto de confianza y empieza a temer que sea rechazado si no respeta mínimamente el equilibrio de sexos. "Es difícil de imaginar que el Parlamento europeo vaya a aceptar un colegio de comisarios que tenga menos mujeres que el actual", explica la portavoz de Juncker. Tan pronto como sea elegido al frente de la Comisión, Jean Claude Juncker se lanzará a formar equipo y a negociar con las capitales los nombres y la distribución de carteras que lo conformarán. Las mujeres han sido las grandes olvidadas por los gobiernos a la hora de sugerir candidatos a comisarios. "Por el momento, oímos hablar sobre todo de hombres y, si seguimos así, el equipo podría acabar formado por 26 hombres y sólo dos mujeres, con diez candidatos aspirando a una cartera de peso en el ámbito económico", ironizan fuentes cercanas a Juncker, que sugieren que se podría premiar con mejores puestos a los países que envíen candidatas femeninas bien preparadas a Bruselas.
La otra incertidumbre que planea sobre la candidatura de Miguel Arias Cañete, que dejó la cartera del Ministerio de Agricultura en el Gobierno de Mariano Rajoy para ser comisario europeo con el peaje habitual en el Partido Popular de hacer campaña durante las elecciones al Parlamento Europeo, es el impacto que sus declaraciones machistas durante la campaña electoral pueden tener durante las audiencias que celebrará la Eurocámara en septiembre para evaluar a los candidatos.
La polémica generada por las afirmaciones de Cañete -que excusó su escasa brillantez en el debate con la socialista Valenciano porque competía con una mujer- cobró dimensión europea cuando varios eurodiputados socialistas y medios de comunicación arremetieron contra el sesgo sexista de esas declaraciones. Fuentes parlamentarias indican que la incertidumbre está haciendo mella en el exministro español, mientras el PSOE reclama a Rajoy que proponga a otro comisario.
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